El baloncesto europeo se está adaptando a los nuevos tiempos. El formato novedoso implantado por la Euroliga hace dos cursos, ha aumentado la competitividad y la transcendencia de la máxima competición del viejo continente en el mundo de la canasta.
Ser una competición prácticamente cerrada, limita mucho las aspiraciones de algunas escuadras que por méritos deportivos y por historia deberían ser de la partida cada curso. Varios de estos casos, se encuentran en España, con equipos como Unicaja de Málaga o Valencia Basket, quienes solo tienen la opción de clasificarse para este torneo vía invitación o conquistando la Eurocup.
Este actual curso, la Fonteta ha tenido el privilegio de vivir varias decenas de encuentros ante los rivales más poderosos del continente. No clasificarse para los playoffs, ha supuesto una desilusión para toda la parroquia “taronja” que quieren subsanar cuanto antes en la competición doméstica.
Hablando de los playoffs, tras el duelo entre Baskonia y Virtus Bolonia, ha quedado definido el cuadro de los ocho equipos que se enfrentarán en cuartos de final. Según Sportytrader, que ofrece una sección dedicada a los pronósticos gratuitos de baloncesto, las cuotas comparadas sitúan al Real Madrid a la cabeza de las preferencias de las casas de apuestas, seguido por los griegos del Panatinaikos y el Mónaco.
Entre los deseos de todos estos aficionados, se encuentra la necesidad de la partida en la próxima Euroliga. Algo que no está garantizado hasta el momento. Los directivos buscan una solución para que el Valencia Basket sea uno de los equipos que dispute la Euroliga 2025-26, además de unirse a la inauguración del nuevo pabellón: el Roig Arena. Dos noticias que, de confirmarse a la par, serían un buen indicador de que el proyecto “taronja” se sigue consolidando en España y Europa.
Las opciones para confirmarse como nuevo equipo de la Euroliga son que la organización aumente el número de equipos participantes de larga duración, es decir conseguir una licencia A por varios cursos. O que una de las dos conseguir una de las tres invitaciones que se disputarían cinco equipos la Virtus, el Valencia, Alba Berlín, Partizán y Estrella Roja.
Es hora de que los teléfonos ardan en las oficinas del Valencia Basket, para intentar conseguir uno de estos billetes de invitado, que es lo que más factible en estos momentos. No parece una tarea sencilla, aunque una gran ayuda puede residir en el CEO de la Euroliga que es español y puede tener una de las últimas palabras.
Sea como fuere, es cuestionable el nuevo formato de la máxima competición continental de baloncesto. Puesto que ser una liga cerrada, complica mucho a otras escuadras como Valencia Basket garantizar a nivel presupuestario ciertos ingresos para afrontar un puerto de categoría especial como es la Euroliga. Veremos en los próximos días si los acordes del “I feel devotion” vuelven a sonar en el feudo del Valencia Basket la campaña 2025-26.
