Ignacio Reig (PSPV-PSOE): “El año 2011 ha sido un desastre de gestión, se gastó lo que no se tenia de cara a las elecciones y ahora el agujero hipoteca la reactivación económica y la creación de empleo”
El concejal socialista Ignacio Reig, ha informado que según el último informe de morosidad aprobado en Xàtiva, el periodo medio de pago ha alcanzado la cifra récord de 267 días. Esto quiere decir que desde que se registra una factura en el Ayuntamiento de Xàtiva hasta que se aprueba su pago transcurren 267 días de media. Reig informó de que, lejos de reducir la morosidad, en Xàtiva se están alcanzando cifras insoportables para los proveedores “El Ayuntamiento está trasladando la morosidad que sufre por culpa de los impagos de la Generalitat a los proveedores. Algunas facturas tardan 400 días en pagarse. Estamos hablando de facturas de suministros normales como el gas y la luz. Hay proveedores que no se quieren acoger al Plan de Pago de Gobierno porque no quieren renunciar al cobro de los intereses generados. El año 2011 ha sido un desastre de gestión y ahora el agujero hipoteca la reactivación económica y la creación de empleo. No se entiende la pasividad del Ayuntamiento. Ha sido una pena gastar así, han tirado el dinero que ahora hace falta para intentar remontar en algo la economía local”, lamentó.
Ayuntamiento “intervenido”.
Asimismo, Reig informó que “esperamos que el Plan de Pagos elaborado por el gobierno central de sus frutos y cobren PYMES y autónomos. Está diseñado para eso, para atajar gestiones irresponsables como la que deja Alfonso Rus. En la práctica el Ayuntamiento queda sujeto a un plan de ajuste muy severo que sobre todo reduce servicios al ciudadano y a cambio le exige un mayor esfuerzo fiscal. De no cumplir con el plan, el gobierno central intervendría el dinero que recauda y que corresponde cada año a Xàtiva. Al final pierde el ciudadano, el político se va sin pagar, y la banca gana”.
El Ayuntamiento de Xàtiva ha remitido al gobierno central una relación de facturas pendientes de 10.474.000 euros que deben pagarse en 10 años con un crédito avalado por el estado. Los dos primeros años sólo se pagarán intereses por lo que el esfuerzo de pago del crédito recaerá en los futuros gobiernos de la ciudad, más allá del 2015.