PSPV denuncia que la mitad de las fuentes de Xàtiva no funcionan o están deterioradas

Los socialistas aseguran que 52 surtidores presentan deficiencias y 17 no funcionan

El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Xàtiva ha elaborado un dosier con una relación de fuentes de Xàtiva que necesitan reparación, limpieza o que simplemente no están en funcionamiento. La conclusión es que de un total de 102 fuentes públicas se han encontrado deficiencias en 52, lo cual supone que una de cada dos fuentes necesita intervención. El regidor del PSPV Ignacio Reig afirma que “muchos ciudadanos se han quejado por el mal estado general de las fuentes en Xàtiva”, y que después de una visita y examen a este centenar de fuentes “nos hemos dado cuenta que las quejas no son infundadas. Si Xàtiva es la ciudad de las 1.000 fuentes, al menos 500 están rotas. Lo habitual es que haya suciedad o que no funcionen y al menos 17 fuentes no tienen ni siquiera grifo”.

Pero Reig destaca que “lo peor es comprobar cómo las que sí que funcionan son las más antiguas, las que tienen un diseño más simple y económico”, y en cambio “las más nuevas y las que incorporan sistemas de tecnología más compleja son las que no funcionan”, lo cual significa que “a más dinero gastado, peor resultado están dando”. Con esto los socialistas ya han solicitado la reparación de las 17 fuentes que presentan defectos más graves y esperan que a lo largo del verano estén todas reparadas.

Fuentes millonarias que no funcionan

Los socialistas critican que sean las fuentes más caras las que peor resultado han dado. En concreto Ignacio Reig cita la fuente de la Baixada de l’Estació, “que ya fue reformada en 2009 después del fiasco del diseño inicial”. Según Reig “un concejal del PP vio una fuente en Oviedo y le gustó, trasladó la idea en Xàtiva y el resultado fue aquella fuente por la cual se podía pasar por debajo de los chorros que se cruzaban”. Pero recuerda Reig que “la fuente no funcionó nunca bien y fue necesario transformarla en la que hay ahora, que tampoco funciona; la broma salió por 61.400 euros”.

Otro “fiasco” son las fuentes de la Plaça de la Bassa puesto que costaron 79.200 euros, que “es la más grande y siempre está sucia porque el carísimo sistema de depuración que está instalado nunca funciona”. Los socialistas recomiendan al gobierno municipal “que destine trabajadores de los primeros 100 minijobs a las tareas de limpieza para que estas estén acondicionadas para el verano”, y que de esta forma las fuentes monumentales “puedan ser un valor de atractivo turístico de la ciudad y no una muestra del abandono de las calles y del patrimonio”.