El pasado domingo 11 de diciembre, tuvo lugar la cuarta etapa de la Ruta dels Monestirs, entre el Monestir de Santa Maria de la Valldigna en Simat, el monasterio de Santa Maria d’Aigues Vives en Carcaixent y el Pas del Pobre en el Paratge Natural Municipal de la Casella.
A las siete y media, con las primeras luces del dÃa, se reunieron los participantes en las puertas del Monasterio de Santa MarÃa de la Valldigna. Allà se concentraron los 108 excursionistas de Alzira, 21 de la localidad de Llutxent, y otros participantes que acudieron de Tavernes de la Valldigna y Gandia para iniciar la etapa por el margen izquierdo del rÃo Vaca, por la zona habilitada de esparcimiento. Tras un azud, el sendero va adentrándose en el Valle entre naranjos y acequias de agua transparente hasta la vecina localidad pasado el cual el sendero GR-236 zigzaguea por el corazón de este valle, poblado de naranjos y surcado de acequias, hasta llegar a la localidad de Benifairó de la Valldigna, en la que se hizo la primera parada para almorzar.
Reanudada la marcha se abandonó la comarca de la Safor, para entrar en la Ribera Alta, por el Portitxol Vell conocido también como la trinchera del antiguo tren de Carcaixent – Denia, un paso que tras el abandono de la lÃnea férrea a finales de la década de los años sesenta, se cerró con el desmesurado crecimiento de la vegetación y los vertidos incontrolados de escombros. El proyecto de la Ruta dels Monestirs, lo desbrozó y limpió para incorporarlo, por su belleza e idoneidad, a su trazado ecoturÃstico.
El cambio paisajÃstico de la Valldigna al d’Aigues Vives es uno más de los atractivos de esta Ruta que va sumando a su recorrido una gran diversidad de contrastes. Ofrece variedad de parajes de costa o de interior, de valles y de montaña, grandes núcleos o pequeñas poblaciones, y en medio de estos atractivos, los monasterios, protagonistas de la Ruta, cada uno con su propio entorno, arquitectura e historia. A mediodÃa, se visitó el cuarto monasterio de la Ruta, el Convento de Santa MarÃa d’Aigües Vives, propiedad de la familia Gomar – Ferrer, más conocida como Tano.
El alcalde de la Barraca d’Aigues Vives, Enrique Gómez, recibió a los excursionistas, quienes acompañados del concejal de Turismo, Rafael Fita, agradecieron al alcalde la atención de acompañarles en la visita al monasterio, donde aprovechó para contar el descubrimiento de la imagen de la patrona de la localidad, la Mare de Déu d’Aigues Vives. La visita se completó con un recorrido por el claustro, la iglesia, la antigua sala Capitular, distintas estancias de la primera planta del edificio conventual, o el dormitorio principal. Destaca el buen estado de conservación del edificio, gracias a los cuidados de los barones de Casanova que lo adquirieron tras la exclaustración, asà como de los siguientes propietarios que lo han sabido conservar hasta la fecha.
Los senderistas continuaron el recorrido hasta la Barraca d’Aigües Vives, donde el alcalde selló los credenciales de su paso.
Por la tarde, a las 14:30 horas se inició el primer tramo del Pas del Pobre, que une la solana de la Barraca con la umbrÃa de la Casellla. Se abandonó el núcleo de la Barraca para dirigirse el grupo a la Serra de les Agulles, hacia el histórico paso natural escogido en la Edad Media por los peregrinos de escasos recursos que transitaban de monasterio en monasterio y que ahora ha dado motivo a esta ruta turÃstica, que lleva su nombre, El Pas del Pobre.
El ascenso por la Solana de la Barraca, se vio recompensado por la magnÃfica vista aérea de los dos valles, Aigües Vives al sur, en el que se aprecia todo lo recorrido en esta misma etapa, y la Casella al norte, con la vista del el tramo pendiente de realizar, visualizando el Paratge Natural Municipal de la Casella, y justo en frente de este mirador improvisado, el Pas del Pobre que da entrada a la Murta. En el extremo occidental, a la falda de la Muntanyeta de Sant Salvador se divisa ya la ciudad de Alzira, destino final del sendero GR-236, iniciado el 18 de septiembre en Gandia, y que el 15 de enero de 2012, a través de las cinco etapas habrá totalizado los noventa y cinco kilómetros de recorrido a través de diversas poblaciones como Almoines, Palma, Alfauir, Almiserà , Llutxent, Pinet, Barx, Simat, Benifairó, Carcaixent o la Barraca. Todo a través de recónditos valles y cadenas de montañas, con variados paisajes que van de la costa al interior, con frondosos bosques que cubren de sombra senderos y caminos, que hacen de esta Ruta una de las más atractivas y completas de nuestra geografÃa, tanto desde el punto de vista cultural como natural, siendo apta para todos los públicos.
Una vez en la parte baja del sendero, un confortable paseo conduce hasta la Font Nova de la Casella, en las puertas del Paratge Natural Municipal de la Casella. Por unas rústicas escaleras de piedra se enlaza con el Sendero de Pequeño Recorrido PR-303, “De Alzira a la Casellaâ€, hasta el Bar de la Casella, finalizando asà la 4ª etapa, con un recorrido aproximado de quince kilómetros.
La quinta y última cita será, como ya se ha indicado, el domingo 15 de enero de 2012. El autobús recogerá a las 9:00 horas en la Plaça del Regne a los participantes y los llevará hasta el Bar de la Casella, para reiniciar el trayecto por el Carasol, por un tramo del PR-303 en sentido inverso, para desviarse el GR-236 por el Pas del Pobre, que por un sendero ascendente va de la Solana de la Casella a la UmbrÃa de la Murta, antigua vÃa pecuaria, conocida como la Vereda dels Frares. A media mañana se visitarán las ruinas del histórico monasterio de Nuestra Señora de la Murta. Por la tarde esta quinta y última etapa, finalizará en Alzira, entregando los senderistas en el Museo Municipal los carnés que han ido sellando a lo largo de las etapas, para certificar de este modo, su participación en esta cuarta edición de la Ruta organizada por la concejalÃa de Turismo del Ayuntamiento de Alzira.
Las personas interesadas en participar pueden informarse en la Oficina de Turismo o en el Museo Municipal.