El concejal del Bloc Nacionalista Valencià de Alzira Carles Aranda Mata, manifestó que ve muy cerca «el pleito después de aprobar el equipo de gobierno, no pagar ninguna cantidad añadida a Promociones Sollana, por las obras de más ejecutadas en el sector Tulell».
Aranda explicó, que si hace «unas pocas semanas tuvimos conocimientos de que el Agente Urbanizador del sector Tulell presentaba una modificación final de las obras y reclamaba más de siete millones y medio de euros (concretamente 7.765.063 euros) al Ayuntamiento de Alzira, ayer, después de la celebración de la Comisión Informativa y el posterior pleno, se aprobaba por el equipo de gobierno no abonar ninguna cantidad a dicha empresa».
Tal y como señala el edil, el equipo de gobierno considera que estos imprevistos » que se han ejecutado y las otras obras impuestas por la administración, deben ser abonadas a cargo de la baja obtenida del contrato firmado en su dÃa entre Promociones Sollana y la UTE Llanera-Elecnor, para la ejecución de las obras de Tulell, que suponÃa un ahorro de másde seis millones de euros respecto al presupuesto inicial».
Desde Bloc, consideran que la diferencia entre ambos contratos es notable, por lo que piden «la máxima información del expediente y exigimos el mayor rigor posible a los técnicos municipales y al equipo de gobierno en la elaboración de todos los estudios y los informes para mantener su criterio por delante de cualquier instancia, incluida la judicial».
En este sentido desde el partido nacionalista se solicita que antes de la recepción de las obras «se elabora un amplio dossier, dando cuenta del mal estado actual de las zonas verdes, viales, parques infantiles o el bulevard central, cuantificando su coste de reparación, como desde el Bloc hemos denunciado en numerosas ocasiones».
Para Aranda la conclusión que se deriva de esta situación «es que con toda seguridad nos espera un nuevo pleito contra el Ayuntamiento de Alzira, por la reclamación de mayores cantidades de dinero por las obras ejecutadas en Tulell y con eso, la inseguridad de conocer si al final las obras serán recepcionadas prnto para el Ayuntamiento y abiertas a toda la ciudad como habrÃa de ser desde hace más de dos años».
Por todo esto desde el Bloc, esperan que su crÃtica «sirva a la alcaldesa de Alzira, por no exigir un seguimiento más exhaustivo y riguroso de las obras, que seguramente hubiera evitado este final».