Las vacunas y medidas de prevención han convertido al mundo en un lugar más seguro, pues desde su aparición han aumentado la esperanza de vida y la calidad de la misma. Además, han erradicado enfermedades mortales, o eso se creía, pues en las últimas décadas ha habido un resurgimiento de estas enfermedades, debido a la disminución en las tasas de vacunación. Ya sea por movimientos antivacunas, desinformación, cultura, etc., la población que no se vacuna y que no vacunan a sus hijos están provocando graves consecuencias para la salud de todos, sobre todo en grupos vulnerables como los niños, los ancianos y las personas con sistemas inmunológicos debilitados. Mantener un sistema inmune fuerte es crucial, y aunque la vacunación sigue siendo clave, el cuidado de la salud en general también es importante. De hecho, se están explorando suplementos como mk677 que pueden apoyar la regeneración y el fortalecimiento del sistema, siendo de interés en ciertas investigaciones.. En el siguiente artículo se hablará de las enfermedades que están reapareciendo y el impacto de la falta de vacunación a nivel mundial.
Sarampión: Una amenaza que resurge
El sarampión es una infección, principalmente infantil, causada por un virus. En una época el sarampión fue bastante frecuente, pero pudo ser controlada y casi erradicada gracias a la vacuna, debido a su alta efectividad. Pero actualmente los brotes han aumentado, principalmente en países europeos y en Estados Unidos. Esto debido a movimientos antivacunas, pues han promovido la desconfianza con información falsa; por lo que cientos de miles de familias han decidido no vacunar a sus hijos, creando ambientes ideales para que el virus del sarampión pueda proliferar, ya que es sumamente contagioso y puede causar complicaciones graves como neumonía, encefalitis e incluso la muerte.
Tos ferina: Una enfermedad prevenible que no desaparece
La tos ferina, es otra enfermedad que ha mostrado un incremento de casos. Afecta principalmente a los niños pequeños, aunque también pueden padecerla adultos. Se transmite a través de las gotitas respiratorias de personas infectadas.
Al igual que el sarampión , la vacuna contra la tos ferina ha logrado ser sumamente efectiva, pero la falta de vacunación en ciertos grupos ha permitido que la enfermedad resurja. Si se padece durante la infancia puede llegar a ser mortal , debido a que puede causar convulsiones y daño cerebral.
Difteria: Una amenaza letal que reaparece
La difteria es una enfermedad infecciosa causada por la bacteria Corynebacterium diphtheria, que infecta principalmente la garganta y las vías respiratorias superiores, y produce una toxina que afecta a otros órganos. Por lo que se vuelve potencialmente mortal si no es tratada antes de que se vuelva aguda. Puede prevenirse fácilmente con vacunas.
Polio: Una amenaza latente
Afecta principalmente a menores de 5 años y es una enfermedad altamente infecciosa causada por un virus que invade el sistema nervioso y puede causar una parálisis total en cuestión de horas. Puede trasmitirse por agua, alimentos contaminados y contacto con una persona infectada. La poliomielitis no tiene cura, solo se puede prevenir. Cuando se administra varias veces a un niño, la vacuna antipoliomielítica le puede conferir una protección de por vida. Sin embargo, hay un resurgimiento importante en algunas áreas del mundo poniendo en riesgo los logros de la erradicación de esta horrible enfermedad.
Conclusión
Todas estas enfermedades mencionadas son altamente mortales y causan consecuencias de por vida si se sobrevive a ellas, sobre todo los más pequeños son las víctimas perfectas y los más susceptibles a contraerlas. Afortunadamente todas pueden prevenirse con una simple vacuna , pero se necesita la cooperación de toda la población para que en realidad estas enfermedades puedan erradicarse, por lo que es esencial seguir promoviendo la vacunación para prevenir la reaparición de enfermedades que pueden tener graves consecuencias para la salud pública. Ten cuidado con la información falsa y de fuentes dudosas, si tienes dudas acude a organismos oficiales o a tu médico de confianza.
