Artículo de opinión de Eduardo Cuñat Forte
Recordamos al añorado Miguel Gila Cuesta, “Gila”, cuando en uno de sus esperpénticos monólogos, haciendo de detective ante un cadáver apuñalado por la espalda, decía aquello de “aquí alguien ha matado a alguien”. Hacía una irónica burla ante una verdad irrefutable.
Hoy, ante lo que en mi opinión es otra verdad irrefutable, debo pensar que “aquí alguien está mintiendo a alguien”. Y lo hago hoy como mal imitador de aquella genial ironía porque ya hay demasiado hartazgo ante tantas contradicciones y dilaciones en iniciar una renovación integral de la red de distribución de aguas y desagües en nuestra ciudad, sustituyendo todas las canalizaciones de plomo y fibrocemento. Una realidad desesperante, una realidad, esta sí, esperpéntica, que clama a aquellos que tienen la responsabilidad de gestionar los recursos públicos que la pongan en marcha, ya.
¿A qué santo viene este nuevo sobresalto en el hartazgo? Pues a la nueva ocurrencia de crear un cuarto depósito de aguas en la ciudad que, supuestamente, garantice el abastecimiento cuando se “inicien” las obras de renovación, según declaraciones efectuadas por el Sr Cerdá.
¿Es incorrecta la idea de garantizar el abastecimiento? No, obvio que no. Pero es que en enero del 2018 ya se anunció a bombo y platillo las obras de esta interconexión de redes para “garantizar el suministro de agua en el caso de averías, mantenimiento, obras en el Canal de Bellús…”.
Alguien miente a alguien. Ahí está la prensa escrita publicada el 15 de enero del 2018 donde se presupuestaba la obra con 141.887,21 euros que completaba la obra ejecutada entre 2003 y 2006 que llevó a cabo la conexión del depósito de la Bola con las redes 3 y 4. Posteriormente, en 2008, se conectó la red 1 al depósito de Aguas de Bixquert.
¿Mentían entonces o ahora?, ¿Quién miente? Nos remitimos a los hechos:
En diciembre del 2021 el Gobierno municipal, cuando habíamos consensuado un texto para el inicio de las obras de renovación de la red, nos mintió, todo fue una estrategia de dilación. Se negó posteriormente a firmarlo sin dar ninguna explicación a la ciudadanía.
En julio de 2023 se nos indicó que estaba en marcha un diagnóstico de la red cuando posteriormente se ha demostrado y publicado en nuestras redes que, no es que no estuviera iniciado, ni siquiera estaba licitado el trabajo. Nos mintieron.
En 2021 se nos dijo que un dron iba a verificar los daños en el Canal de Bellús, que lo iba a hacer a lo largo del 2022 según respuesta de Reig en Plenario. Una nueva mentira, ni en el 2022 ni en el 2023, aunque dicen que el dron misterioso ha pasado este año, ¿otra mentira?
En 2022 se nos dijo en Plenario que el Ayuntamiento iba, con sus propios medios, a ejecutar la Ley 7/2022 realizando un censo de fibrocemento en el término municipal. Nueva mentira, ni se hizo, ni está hecho incumpliendo lo mandatado en la propia Ley.
En julio de 2022 se nos dice que el censo de fibrocemento mandatado por la Ley 7/2007 se había acordado que lo realizara la Mancomunidad. Mentira, en reunión mantenida con el Presidente de la Mancomunidad negó tajantemente esta cuestión y nos remitió a la responsabilidad de cada Ayuntamiento en su cumplimiento.
Reiteradamente el concejal de ciclo hidráulico, Ignacio Reig, ha afirmado en diferentes medios de prensa y radio que en el agua de Xàtiva no hay plomo ni amianto. Miente, y lo sabe que miente por las múltiples analíticas efectuadas a lo largo de la ciudad durante los últimos años.
Podría seguir dando mil ejemplos de las continuas mentiras y dilaciones con las que la ciudadanía de Xàtiva debemos lidiar con este modelo cutre de hacer política. Con mucha tristeza debo decir que la política de cercanía y consenso que debiera presidir una acción de gobierno municipal, aquí brilla por su ausencia.
Hoy sólo añadiré una más, la torpeza política y la enorme desafección que provoca que ante una Moción, completamente racional y comedida presentada por la Plataforma “Casc Antic Digne i Viu”, el actual Gobierno municipal volviera a rechazarla con los votos del PSOE y XU en el Plenario de marzo del 2023. Cuando, léase la Moción, ésta se fundamenta en una simple calendarización plurianual de las actuaciones.
La misma Moción que un año antes, en marzo del 2022, presentaran y votaran a favor los concejales de Xàtiva Unida y que este año, una vez en el Gobierno, se obró un milagro transformador y votaron en contra ante el estupor de la ciudadanía presente.
Vamos para diez años con estos responsables del ciclo hidráulico y resulta que ahora lo prioritario es hacer un cuarto depósito como consecuencia de un “diagnóstico”.
¿No es para que rebose el hartazgo, por encima incluso del inexistente 4º depósito? Pues eso, concluyo, “aquí alguien miente a alguien”.
Eduardo Cuñat Forte
