Los buitres son uno de los grupos de especies más amenazados del planeta. En África, 7 de las 11 especies de buitres que existen se encuentran en peligro o estado crítico de desaparecer. Resulta especialmente «cruel» que los están aniquilando los furtivos para evitar que delaten la posición de los animales abatidos, como rinocerontes o elefantes.
Desde sus inicios BIOPARC ha querido llamar la atención sobre estas especies generalmente minusvaloradas pero que resultan imprescindibles para mantener el equilibrio ecológico y especialmente ahora, con motivo de la celebración del Día del Medio Ambiente. De esta forma, el parque valenciano alberga 5 de esas 11 especies africanas de buitre: dorsiblanco (Gyps africanus), encapuchado (Necrosyrtes monachus), cabeza blanca (Trigonoceps occipital), leonado (Gyps fulvus) y palmero (Angolensis Gypohierax). De las cuales, las 3 primeras están entre las 7 en peligro crítico de extinción.
En Europa, algunos fármacos empleados en la ganadería como el diclofenaco están intoxicando a cientos de buitres. En muchos casos, los ejemplares de ganado que han sido tratados con estos medicamentos, a su muerte, son abandonados en el medio natural sin ningún tipo de control, pasando a convertirse en el alimento de los buitres. De este modo, dichas sustancias tóxicas pasan a sus cuerpos, pudiendo ocasionar la muerte del individuo.
Además, hay que tener en cuenta que los buitres, debido a su envergadura alar, son capaces de desplazarse cientos de kilómetros sin apenas gastar energía en vuelo, por lo que pueden abarcar amplias áreas de terreno aumentando así la probabilidad de encontrarse con ejemplares de ganado. Podríamos decir que son “limpiadores de la naturaleza y ahorradores de energía”.
La desaparición de estos animales sería equivalente a una «huelga en los servicios de limpieza en una gran ciudad». Los buitres desempeñan un papel fundamental en los ecosistemas pero también para nuestra salud ya que son capaces de descomponer algunas bacterias como es el caso de las esporas del ántrax. Debemos empezar a considerarlos una parte importante de nuestro planeta, porque de no ser así, están condenados a la extinción.
En BIOPARC Valencia el objetivo es concienciar sobre su situación y garantizar su bienestar y, para ello, se realizan enriquecimientos ambientales que les permiten relacionarse, desarrollar sus instintos de búsqueda de alimento e interactuar con otras especies. Podemos verlos en la exhibición educativa “El ciclo de la vida” y así entender su imprescindible papel en la naturaleza. Especialmente durante este mes, en que el día 5 celebramos Día Mundial del Medio Ambiente que tiene como propósito impulsar acciones de conservación y sensibilización sobre la importancia de proteger el medio natural.