Sant Domènec nos acerca a la vida a través de los huesos prehistóricos

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La exposición estará hasta el 20 de marzo

Ayer se presento la exposición ‘Restes de vida, restes de mort’, una exposición ‘arriesgada’, en cuanto a la temática, puesto que es la primera vez que un museo de la Comunitat Valenciana realiza una revisión exhaustiva sobre la arqueología de la muerte, y también valiente en el montaje. Estará hasta el próximo 20 de marzo en el Convento de Sant Domènec.

El alcalde de Xàtiva y presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, afirma: «Es una exposición didáctica, que se puede interactuar con ella. Por ello, exigía un lugar emblemático, y lo hemos conseguido con el Convento de Sant Domènec«.

Por su parte, el diputado de Cultura, Salvador Enguix, asegura que «la muestra es lo suficientemente amplia e interesante para que la gente pueda entender la obra«. La concejala de Cultura de Xàtiva, Mª José Pla, declara: «Hemos tenido la suerte de ser la primera ciudad que acoge la exposición«. Además, Pla dice que se realizará un horario muy amplio para hacer visitas de grupo, sobre todo escolares. La edil setabense confirma que «la exposición se ha quedado magnífica, y gustará mucho a la gente».

La directora del Museo de Prehistoria, Helena Bonet, dice que «lo que más interesa a la gente es los huesos y los muertos, y esta exposición lo tiene. Se conocerá los restos humanos a través de rituales, y con ello, se conocerá el comportamiento social y cultural de la época«.

Con esta exposición, el Museo de Prehistoria pretende sintetizar su conocimiento sobre las sociedades prehistóricas a través de los avances en el campo de la arqueología funeraria y de la osteoarqueología, en el ámbito de nuestras tierras.

La exposición está planteada con cuatro temáticas: enfrentarse a la muerte, la arqueología funeraria, cómo era morir en nuestras tierras durante la Prehistoria, y finalmente, las nuevas técnicas para estudiar viejos huesos. Todo ello, con un dinamismo audiovisual en el que «los huesos hablan de los vivos, y no de los muertos», afirma Bonet.