El dril es un bonito y poco conocido primate que se encuentra en situación «crítica», con una población estimada en su hábitat natural de 3.000 individuos
En el bosque de ribera de África ecuatorial ha nacido una nueva cría de dril (Mandrillus leucophaeus), y ya son cinco en siete años, lo que supone un motivo de orgullo para el equipo técnico de BIOPARC Valencia. En este hábitat «multiespecie» vive un grupo de estos amenazados primates, rodeados por sitatungas, hipopótamos pigmeos, cercopitecos, pelícanos y gansos del Nilo. El grupo está formado por ocho individuos, incluida la nueva cría, lo que convierte a BIOPARC en uno de los pocos recintos europeos que tienen más de siete ejemplares. Estos grupos están compuestos por un macho dominante, las hembras y sus descendientes. BIOPARC está contribuyendo activamente a su conservación, tanto in situ, con los proyectos de la Fundación, como ex situ, con el programa de reproducción.
En esta ocasión los progenitores son el macho, Rafiki, que llegó en septiembre de 2007 del Zoo de Hannover (Alemania) y la hembra Abuja que se trasladó en febrero de 2008 desde Port Lympne Animal Park (Reino Unido). Estos nacimientos son un éxito dentro del EEP (Programa europeo de reproducción en cautividad de especies amenazadas), cuyo objetivo es garantizar la pervivencia de la especie y convierten a BIOPARC en un «aliado» de la conservación de la biodiversidad de la naturaleza.
Los driles habitan en Camerún, Nigeria y la isla de Bioko (Guinea Ecuatorial) y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), considera que esta especie es una de las más amenazadas de primates africanos, con unos 3.000 ejemplares en estado silvestre según la asociación “Save the Drill”. Bastante desconocidos frente a sus «parientes» los mandriles, presentan un morro alargado y dotado de enormes caninos que les confiere un aspecto “feroz», especialmente al macho que, además, porta una preciosa melena similar a la del león. De pelaje marrón grisáceo teñido de verde aceituna, los machos resaltan en la espesura de la selva por el característico colorido de la zona perianal que se muestra sonrosada con un llamativo azul y violeta y también por “la pincelada” rojiza justo debajo del labio inferior.
Fundación BIOPARC, ha colaborado varios años en un significativo proyecto de recuperación y reintroducción de driles en el Santuario de la Montaña de Afi, en Nigeria dentro de sus acciones de conservación in situ.