La consellera de Cultura ha presidido la presentación de la obra, presupuestada en 17.000 euros
La Diputación de Valencia ha destinado un total de 17.000 euros a la restauración del retablo de San Miguel y Santa María Magdalena, que ya puede visitarse en el museo de la Colegiata Santa María de Xativa.
La consellera de Educación, Cultura y Deporte, María José Català, ha asistido a la presentación de la restauración de esta obra emblemática. En el acto han estado presentes también el alcalde de Xàtiva, Alfonso Rus, la Directora General de Cultura, Marta Alonso, la Directora del Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, Carmen Pérez y concejales del Ayuntamiento. El abad, Arturo Climent, ha mostrado a las personalidades asistentes diferentes detalles de la colegiata. Los trabajos de intervención en el retablo han sido realizados por la Generalitat Valenciana a través del Instituto Valenciano de Conservación y Restauración.
La consellera ha explicado que se trata de una obra muy importante, «datada a finales del siglo XV o principios del XVI, coincidiendo con un momento de gran esplendor, cuando Xàtiva fue un centro de gran actividad artística». Català ha indicado que el retablo se expuso en la Exposición Universal de Barcelona en 1929.
Técnicas del Instituto de Conservación han detallado que el retablo presentaba un estado de conservación poco óptimo. La tabla central evidenciaba importantes alteraciones y pérdidas que estaban poniendo en peligro su perdurabilidad en el tiempo. Presentaba una pérdida total del estrato preparatorio y película pictórica quedando a la vista el soporte de madera y la tela utilizada como sistema de refuerzo y protección del soporte.
Además, en toda la superficie se apreciaba una densa capa de polvo y suciedad ambiental. Como paso previo, se llevaron a cabo una serie de estudios científicos, con unan exhaustiva documentación fotográfica y un análisis de materiales y técnica. En primer lugar, se protegieron todos los bordes de la tabla central para proceder a la eliminación del marco moldurado no original. En la zona inferior, se protegió y consolidó el estrato pictórico para proceder con la intervención del soporte. Con resina epoxídica se rellenaron todos los faltantes del soporte leñoso de toda la zona inferior, bordes y travesaños.
En la cara anterior, se eliminó la protección del estrato pictórico para proceder con su consolidación estrato por estrato y se repuso el soporte textil.
Destacar que la limpieza se llevó a cabo en varias etapas. Tras realizar un barniz de trabajo de resina natural dammar, se procedió con la fase de estucado. Para ello se utilizó un estuco tradicional aplicado a pincel capa a capa, la reintegración cromática se realizó en varias fase de intervención. Una primera fase con colores al agua mediante la técnica del regatino y una segunda etapa con colores al barniz aplicado a modo de veladuras. Para finalizar, se aplicó un barniz de protección.
Señalar que en el estado inicial, los dorados presentaban un buen estado de conservación. Este retablo es un magnífico ejemplo de cómo los elementos formales del Renacimento quieren abrirse paso en una pintura aún de temática medieval, como así lo atestiguan los oros cincelados en los fondos, los brocados de las telas y las posturas de los personajes.
Más información sobre los estudios y restauración en http://www.ivcr.es