Grupo de Monologuistas 13 se consolida con el humor más diverso

El Grupo de Monologuistas 13 nació gracias al curso de monólogos impartido por Rafa Miragall este año en Xàtiva. Tal y como afirman ellos ‘ahora se reproduce repartiendo humor y buen rollo con sus diferentes tipos de actuaciones, allá por dónde vaya y sea aceptada‘.

Portal de Xàtiva entrevista a uno de sus componentes Alejandro Bellver, que nos ha contado cómo es este grupo y qué aspiraciones tiene.

– ¿Cómo decidisteis formar este grupo?

Porque después del Curso de Monólogos que asistimos en Xàtiva empezamos a actuar en algunos sitios. Además, entre nosotros nos llevamos muy bien.

– ¿De dónde viene el nombre?

En uno de los ensayos, hablando en broma, quisimos llamarnos Grupo de Monologuistas. Y el trece viene a partir de un chiste de uno de nostros de 13 pesetas. Se quedó así: Grupo de Monologuistas 13.

– ¿Cómo lo organizáis para acudir a las actuaciones?

Dependiendo la demanda de la persona que nos contrate, si quiere a dos, tres, incluso a cuatro por noche. Actuamos aproximadamente una hora, y así se hace más ameno ya que no estás viendo al mismo monologuista durante tanto tiempo.

– ¿Quién escribre los monólogos?

Escribimos nosotros el texto, aunque hay algunos que no tienen la sufiente confianza todavía para hacerlo, y adaptan monólogos ya hechos. La ventaja que tenemos nosotros es que nos ayudamos unos a otros; cada monólogo lo escribe uno, pero se retoca entre todos.

– ¿Cuáles son los temas de los monólogos principalmente?

Intentamos no meternos en política, y si lo tocamos de forma muy objetiva, nosotros somos apolíticos; religión, sexo, alcohol, familia, sexismo….; pero no somos monotemáticos. Intentamos que sea para todo el mundo, aunque no para todos los públicos. Cada uno de los monólogos puede ir dirigido a una cosa. Lo bueno que tenemos es que cuando vamos unos cuantos no se hace muy pesado una hora entera, porque variamos con un poco de todo.

– ¿Cómo ha progresado el grupo?

Somos una ‘piña’, pero también es verdad que cada uno se lo coge como quiere. Si alguno se lo quiere coger más profesionalmente, lo puede hacer. Además, a las actuaciones vamos quien podemos y queremos, no es un compromiso que nos cojamos todo el grupo.

– Personalmente, te lo vas a coger profesionalmente?

Sí, no soy el único, pero sí que intento tirar por lo profesional.

– ¿Qué ocurre cuando estás en una actuación y la ‘gracia no tiene tanta gracia’?

Las actuaciones que te salen mal son las que más aprendes. Además, depende mucho del público, porque el mismo monólogo delante de gente joven no tiene la misma repercusión que con gente mayor. Hay momentos en los que sí que se pasa mal, y se te pueden olvidar fragmentos.

– Hablando de olvidar… ¿Qué se hace cuando te quedas con ‘la mente en blanco’?

Empiezas a improvisar para salir del paso como puedes, aunque hay algunos que se quedan en blanco y pasa el rato… pero nada. A mí me pasó una vez por hacer una gracia. En uno de mis monólogos, que me sabía a la perfección, quería introducir un trozo de un monólogo de una amiga de Sevilla. La frase era: ‘lo malo de quedarse en blanco es que cobras los cheques del mismo color’. Al introducir el fragmento en mi actuación se me olvidó lo que iba a continuación. (risas)

– Cuéntanos alguna anécdota…

En una de las actuaciones que realizamos para promocionarnos, acudimos cuatro o cinco de nosotros. Era jueves y muchos trabajan al día siguiente y tenían que madrugar. Uno de nosotros que era del pueblo dónde actuábamos cuando terminó el monólogo empezaron a corear: ‘otra, otra, otra’. Éste se creció y estuvo 20 o 30 minutos más haciendo otro monólogo. Además, nos preguntó a nosotros, que estábamos lejos, si queriamos salir, nosotros contestamos que no, pero entendió que saliamos uno a uno. No es la primera vez que lo hace.

– ¿Cómo os podemos seguir?

A través de las actuaciones por supuesto, por facebook y por tuenti, y estamos trabajando en la página web, aunque la cosa va despacio.