El RC Alzira se impone al Ciencias en un partido espectacular (18 a 9)

El RC Alzira cosiguió imponerse a un rival de mucha entidad como és el Ciencias. Los chicos de Tomás Pardo se habian tomado el choque muy en serio, querían demostrarse a sí mismos que eran capaces de ganar al líder. Para ello el «mister» les había pedido máxima concentración durante todo el partido, mantener la máxima posesión del balón, y jugar siempre en campo contrario.

Con estas premisas daba comienzo el encuentro que fue dominado por los alzireños desde el pitido inicial hasta el final. En una demostración de derroche físico a pesar del calor reinante en la mañana del domingo, el Alzira mantenía al rival en su campo, dominando en todas las facetas de juego, en «melé» y sorpresivamente, también en la «touche», que hahía sido durante toda la temporada el talón de aquiles de los alzireños. Cosecuencia de este dominio, dispusieron de varias ocasiones de ensayo que sin enbargo no lograron materializar, unas veces por exceso de nervios, y otras por el oficio mostrado por los hombres del Ciencias en el arte de defender a lo «catenaccio».

El excesivo furor combativo de los alzireños en las «melés» abiertas, fue sancionado por el colegiado con dos golpes de castigo que Bis se encargó de convertir desde cuarenta metros, por lo que pese al dominio local, eran los visitantes quienes se adelantaban (0- 6) en el marcador. Transcurría el ecuador de la primera parte y el Alzira continuó insistiendo hasta obtener dos golpes de castigo a su favor que fueron convertidos por Taba para empatar el encuentro, así empezaba el duelo particular que los «pateadores» de ambos conjuntos iban a mantener durante el encuentro. Con empate se llegó al descanso.

Todo apuntaba a que el equipo que fuera capaz de mantener la «fuerza mental», se llevaría el gato al agua, y el Alzira ya había demostrado esa determinación que empieza a ser costumbre, ante el Elche. Así fue, y en la segunda mitad continuó dominando el juego, buscando desesperadamente el ensayo sin conseguirlo, imponiendo una agresividad defensiva que lograba desquiciar al rival que fue sancionado con otro golpe de castigo, otra vez Taba lograba transformar para adelantarse en el marcador (9-6). Sin embargo a los pocos minutos otra vez Bis lograba transformar un golpe a favor del Ciencias, de nuevo tablas (9-9).

Pero el Ciencias empezó a dar muestras de debilidad cometiendo faltas antijuego, buscando con inpotencia romper el ritmo de los alzireños, por lo que el colegiado acabó sancionando repetidamente a los visitantes que le protestaban airadamente sus decisiones, algo inaudito y prohibido en este deporte. Hasta con tres golpes de castigo más fue sancionado el equipo visitante, el héroe del dia, Taba, se encargó de transformar uno tras otro hasta dejar el resultado final en 18 a 9.

En conclusión, partido atípico en cuanto a la falta de ensayos, y con nueve golpes de castigo, todos ellos transformados, seis por el Alzira y tres por el Ciencias, pero sin embargo el partido resultó ser espectacular, de los que hacen afición. Destacar por el Alzira tanto a los delanteros como a los tres cuartos que dieron la cara durante todo el partido sabiendo estar a la altura de esta «final», y como no, a Taba, protagonista del partido, que al finalizar el encuentro fue ovacionado por parte de sus compañeros, despidiéndose así por la puerta grande, ya que próximamente regresará a su país, Uruguay, de forma definitiva.

Campeonato de España de selecciones autonómicas M-16

Por su parte el jugador infantil del RC Alzira, Yannik Pardo, se ha proclamado campeón de España con la selección valenciana, reeditando así el título que ya obtuviera el año pasado. El campeonato se ha disputado el pasado fín de semana en la ciudad malagueña de Marbella, donde el combinado valenciano se impuso en la final 22 a 18 a la selección del País Vasco, previamente derrotaron 5 a 0 a Cataluña y 6 a 10 a Castilla-León. Yannik, que ocupa la demarcación de «pilar», a jugado los tres partidos de titular y se perfila como un nuevo valor del rugby alzireño y valenciano.